Entrada de blog

Este artículo de The Economist señala la necesidad de que los grandes generadores de residuos alimentarios se preparen para cumplir la prohibición de materiales orgánicos comerciales de julio de 2014. El artículo contextualiza la ley de Massachusetts como parte de una tendencia que comenzó en Europa y se está extendiendo a Estados Unidos, sobre todo en zonas donde el coste de la eliminación de residuos es elevado debido al espacio limitado de los vertederos. Los residuos alimentarios pueden desviarse para generar ingresos mediante la producción de energía, así como para alimentar a los hambrientos a través de programas de donación de alimentos, convirtiendo lo que había sido un costoso residuo en un recurso para empresas, comunidades e instituciones.